A pesar de las expectativas de transformación económica global, donde el sector informal debería disminuir con el crecimiento del sector formal, la realidad es otra. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), muchas economías, incluyendo la de Chile, siguen enfrentando un considerable sector informal que no solo persiste, sino que en ocasiones crece. Esta situación refleja la complejidad de las economías en desarrollo y subraya la importancia de políticas efectivas y adaptadas a la realidad local.
En este contexto, el municipio de Curicó, en colaboración con la Dirección de Servicios Operativos y Seguridad Pública y el apoyo de Carabineros de Chile, ha intensificado sus operativos contra el comercio ilegal, especialmente en áreas críticas como el centro de la ciudad y las inmediaciones del nuevo hospital. Estas medidas buscan responder a las necesidades de seguridad y orden público, enfrentando uno de los aspectos más desafiantes del sector informal: el comercio ilegal.
Juan Espinoza Ávila, inspector de la Dirección de Servicios Operativos, destacó la regularidad de estas acciones: «Estamos comprometidos con operativos constantes para erradicar el comercio ilegal en las calles, concentrándonos en zonas de alta circulación y donde la comunidad ha expresado mayor preocupación».
El proceso no solo implica el decomiso de mercaderías, que son redirigidas a instituciones benéficas como hogares de ancianos y centros de menores, sino también un esfuerzo conjunto para mantener la fluidez y seguridad en la vía pública. «Nuestro objetivo es garantizar la seguridad y la libre circulación, evitando obstrucciones que puedan afectar tanto el tránsito vehicular como peatonal», explicó Espinoza.
Los operativos de fiscalización se desarrollan durante todo el día y la noche. El personal de inspección está desplegado en el centro de la ciudad desde las 9:00 hasta las 19:00 horas, coincidiendo con el horario comercial. Posteriormente, turnos especiales se encargan de abordar problemáticas nocturnas como estacionamientos ilegales, vehículos en situación de abandono y venta de alcohol en zonas residenciales.
El objetivo primordial de estas acciones es garantizar la seguridad, la fluidez del tránsito vehicular y peatonal. «Buscamos mantener la seguridad en las calles de las poblaciones, evitando obstrucciones al tránsito y garantizando el libre desplazamiento de las personas», afirmó Juan Espinoza.
Este enfoque integral muestra la dedicación del municipio para mejorar la calidad de vida en Curicó, alineándose con los desafíos que plantea el sector informal a nivel nacional e internacional, y destacando la necesidad de políticas que efectivamente respondan a la dinámica local.
