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Huracán Beryl afecta la península de Yucatán, en México, con condiciones extremas

El huracán Beryl, que ya ha dejado un rastro devastador en el Caribe, continúa su trayectoria implacable hacia la península de Yucatán. El fenómeno tocó tierra el miércoles en Jamaica como un potente huracán de categoría 4, causando la muerte de al menos siete personas en la región —tres en Venezuela, tres en Granada y una en la isla Unión— antes de dirigirse hacia México.

Con vientos que superaron los 215 km/h, Beryl dejó a más de 400,000 personas sin electricidad en Jamaica, aunque afortunadamente no se reportaron víctimas mortales en esta isla.

A las 05:03 AM hora local de Chile, el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos confirmó que la Península de Yucatán comenzó a experimentar condiciones de huracán dentro de la zona de alerta. Las autoridades urgen a la población a refugiarse en lugares seguros, advirtiendo que las condiciones actuales son potencialmente mortales.

 

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, enfatizó la gravedad de la situación en un mensaje en la red social X, declarando que el huracán entrará por Tulum, una zona densamente poblada y próxima al mar. «Es crucial trasladarse a zonas altas, refugios o residencias de familiares y amigos en áreas seguras. No debemos vacilar, los bienes materiales se pueden recuperar, la vida humana es lo más valioso», subrayó el presidente.

 

Se anticipa que después de atravesar la península, Beryl reganará fuerza en el Golfo de México y tocará tierra nuevamente en el noreste de México, cerca de la frontera con Texas. El Servicio Meteorológico Nacional de México prevé que el huracán traerá consigo lluvias de intensas a torrenciales en los estados de Campeche, Quintana Roo, Tamaulipas y Yucatán, y lluvias muy fuertes a intensas en Chiapas, Hidalgo, Nuevo León, Oaxaca, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Tabasco y Veracruz.

La Coordinación Nacional de Protección Civil ha activado la alerta naranja (alto peligro) en varios municipios de Quintana Roo desde el miércoles, mientras que los municipios en los estados de Yucatán y Campeche permanecen en alerta amarilla (peligro medio).

El huracán avanza a una velocidad de 26 kilómetros por hora, con vientos máximos sostenidos de 185 kilómetros por hora y rachas que alcanzan hasta 250 kilómetros por hora.

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