La situación en Yemen se torna más tensa con el reciente anuncio de los rebeldes hutíes, respaldados por Irán, sobre la pérdida de cinco de sus combatientes y seis heridos como resultado de 73 bombardeos llevados a cabo por Estados Unidos y el Reino Unido. Estos ataques son una respuesta a las acciones insurgentes en el mar Rojo.
El portavoz militar de los hutíes, Yahya Sarea, transmitió los efectos devastadores de la acción conjunta de Estados Unidos y el Reino Unido, destacando los bombardeos contra objetivos en las provincias de Al Hudeidah, Taiz, Hajjah y Saada, todas bajo el control de los insurgentes.
«Sarea responsabiliza al enemigo estadounidense y británico por su agresión criminal contra nuestro pueblo yemení, y asegura que no quedará sin respuesta ni castigo», advirtió el portavoz, subrayando la determinación de los hutíes de defender la soberanía y la independencia de Yemen.
Adicionalmente, Sarea afirmó que estos bombardeos no disuadirán a los insurgentes de bloquear la navegación de barcos vinculados a Israel y cualquier embarcación que se dirija a puertos israelíes a través del mar Rojo. Acusó a Estados Unidos y el Reino Unido de apoyar los «crímenes israelíes en Gaza».
En respuesta a la acción militar, diez naciones, incluyendo Estados Unidos, Reino Unido, Australia, Baréin, Canadá, Países Bajos, Dinamarca, Alemania, Nueva Zelanda y Corea, emitieron un comunicado conjunto. En él, destacaron que la acción se llevó a cabo en defensa del comercio internacional y la seguridad de quienes transitan por el mar Rojo, crucial para el comercio marítimo global.
Los hutíes declararon una «guerra abierta» contra Estados Unidos y el Reino Unido, anunciando ataques contra sus buques de guerra en el mar Rojo, donde lideran una coalición naval para proteger el tráfico marítimo. El presidente Joe Biden explicó que los ataques fueron en respuesta a los «sin precedentes» lanzamientos de misiles hutíes que amenazaban la seguridad y la libertad de navegación.
Este reciente episodio aumenta la tensión en la región y plantea nuevas preguntas sobre la escalada del conflicto en Yemen, así como la respuesta internacional a estas acciones.
