Maule, Chile – La ejecución del presupuesto del Ministerio de Obras Públicas en la Región del Maule ha generado intensos debates entre destacados políticos locales. La senadora Paulina Vodanovic (PS) criticó recientemente la lenta utilización de los fondos asignados, señalando que «las necesidades de la Región no pueden esperar».
Esta declaración provocó una respuesta contundente de Pablo del Río, Consejero Regional y Presidente Regional del Partido Radical, replicó en términos duros a la senadora. «Lo lamento de una senadora designada que, para mi gusto, no tiene una validez democrática y que, por lo demás, ni siquiera conoce el territorio. Yo me comuniqué con el SEREMI de Obras Públicas del Maule, quien me manifestó que en los últimos años ha habido un crecimiento en la inversión, con carácter sistemático de 2022 en adelante. Hay que entender también el contexto de que el MOP tiene mayor presupuesto a ejecutar tras las inundaciones», afirmó el consejero regional.
En su defensa, Ana Muñoz Vargas, Vicepresidenta Regional del Partido Socialista, intervino, destacando la gravedad de la situación al mencionar que solo el 8% del presupuesto ha sido utilizado, información confirmada por el Subsecretario del Ministerio.
Muñoz Vargas criticó fuertemente la actitud de Del Río, acusándolo de falta de respeto hacia la senadora Vodanovic y de no atender adecuadamente a las expectativas de la comunidad local, especialmente en un contexto de desastres naturales recientes que han afectado la región. «Esperamos que la inversión se realice con prontitud y rapidez,» afirmó, llamando a un debate más constructivo y alineado con los intereses de los ciudadanos.
La dirigente socialista también subrayó la necesidad de una gestión eficiente que permita a la ciudadanía verificar los avances en la gestión del Gobierno del Presidente Boric, calificando cualquier gestión por debajo de las expectativas como una deslealtad hacia el propio gobierno.
Este enfrentamiento político subraya las tensiones existentes en la gestión de fondos públicos y el alto grado de responsabilidad que los ciudadanos demandan de sus representantes.
