Un suceso insólito y macabro ha capturado la atención pública y mediática en Río de Janeiro, Brasil. Érika de Souza Vieira Nunes, una mujer local, causó estupor al presentarse en una sucursal bancaria con el cadáver de su supuesto tío, Paulo Roberto Braga, para intentar realizar un retiro bancario de 17.000 reales (aproximadamente 3.161.556 pesos).
El personal del banco sospechó de inmediato la situación debido a la evidente falta de respuestas y movimientos por parte de Braga, quien estaba siendo sostenido en una silla de ruedas. Este incidente fue grabado por los empleados del banco, quienes alertaron rápidamente a la policía y al Servicio Móvil de Atención de Emergencias (Samu). El equipo de emergencia confirmó que Braga había fallecido varias horas antes de ser traído al banco.
Durante el incidente, Érika de Souza Vieira Nunes fue grabada intentando mover la mano de su tío para que firmara documentos bancarios, lo que ha generado una fuerte reacción tanto en redes sociales como en los medios. La Policía de Bangu intervino prontamente, llevando a Nunes a la comisaría para más interrogatorios.
TV Globo, entre otros medios locales, reportó que Nunes declaró ser la cuidadora de su tío, quien estaba «muy débil» en sus últimos días. Las autoridades están investigando la veracidad de su relación de parentesco y su posible participación en el fallecimiento de Braga. Además, enfrenta posibles acusaciones de malversación de fondos y profanación de cadáver.
Este perturbador evento ha reavivado el debate sobre la seguridad y los procedimientos en instituciones financieras, así como las medidas de protección para personas vulnerables. Las investigaciones continúan y se espera más información en los próximos días.
