Un escándalo de gran magnitud ha estallado involucrando a los clubes Pasión Azul Rancagua y Audax Rengo, tras una grave denuncia de un supuesto incumplimiento por parte de los organizadores de un torneo de fútbol infantil realizado en el extranjero. Según la denuncia, 190 niños de Chile quedaron varados sin poder participar en la competencia, enfrentando además condiciones adversas de alojamiento y logística, contrariando las promesas iniciales hechas por los organizadores.
El evento ha sido marcado por denuncias de estafa y desorganización, llevando a las familias afectadas a exigir acciones legales. Según las denuncias de los padres y apoderados, los organizadores solicitaron un pago adicional de 50,000 dólares, justificándolo como una multa por un supuesto “incumplimiento de reglas”. Sin embargo, investigaciones preliminares indican que tal sanción nunca fue oficial y que los fondos fueron destinados a cubrir deudas ajenas al torneo.
Complicando aún más la situación, se ha revelado que un hermano del conocido futbolista Jean Beausejour estaría involucrado en este esquema. Además, la presencia de un diputado regional en el torneo suspendido ha añadido una dimensión política al ya tenso ambiente.
Las autoridades pertinentes están investigando el caso, mientras que las familias afectadas continúan buscando respuestas y reclamando justicia para los niños y adolescentes afectados por esta lamentable situación.