En un caso que ha capturado la atención pública, un funcionario municipal de San Javier ha sido condenado por malversación de caudales públicos, tras una investigación que reveló la desviación de más de 25 millones de pesos en la venta de bonos de Fonasa. La investigación se inició en 2023 cuando el propio municipio entregó a la fiscalía local una serie de antecedentes que evidenciaban irregularidades.
El funcionario, quien formaba parte del personal administrativo y estaba a cargo de la venta directa de bonos, tenía la responsabilidad exclusiva de manejar el dinero recaudado y depositarlo diariamente en la tesorería municipal. Sin embargo, fue descubierto manipulando indebidamente los fondos dentro de la caja fuerte que estaba bajo su control.
El fiscal jefe de la comuna, Patricio Caroca, presentó la acusación que culminó en un procedimiento abreviado y la condena del implicado. “Durante los meses de julio a agosto de 2023, el funcionario Pablo Guerrera Aravena desvió poco más de 25 millones de pesos. Las diligencias permitieron clarificar su modus operandi y su responsabilidad directa en el hecho”, declaró el fiscal Caroca.
Como resultado, el tribunal sentenció a Guerrera Aravena a cinco años de presidio menor en su grado máximo y una multa de 10 Unidades Tributarias Mensuales. Adicionalmente, gracias a la intervención del Ministerio Público, se recuperó la totalidad del dinero malversado, el cual fue reintegrado a las arcas municipales. La pena privativa de libertad fue sustituida por libertad vigilada intensiva, y el condenado deberá reportarse periódicamente a la Gendarmería de Chile de Linares
