En el marco de una extensa investigación realizada por la Unidad de Análisis Criminal y Alta Complejidad de la Fiscalía Regional del Maule, en conjunto con la Brigada Investigadora de Robos (BIRO) de la Policía de Investigaciones (PDI) de Linares, se logró desbaratar una peligrosa banda criminal que operaba en Longaví y sectores aledaños, dedicada a delitos violentos, infracciones a la Ley de Drogas y Ley de Armas.
El origen de esta investigación se remonta a septiembre de 2023, cuando un grupo de sujetos encapuchados perpetró un violento robo con intimidación en una botillería de Linares, donde, portando armas de fuego, amenazaron al dependiente y a los clientes, sustrayendo dinero en efectivo y mercadería. Las diligencias iniciales permitieron la detención de cuatro personas, quienes actualmente permanecen en prisión preventiva. No obstante, las indagatorias continuaron para desarticular la totalidad de la organización delictual.
A través de la denominada Operación Casajos, se llevaron a cabo allanamientos simultáneos en nueve domicilios de Longaví y sus alrededores, lo que resultó en la detención de siete individuos y la incautación de un importante arsenal y diversas sustancias ilícitas. Entre las evidencias incautadas se encuentran: tres escopetas, una pistola 9 mm, una pistola de aire comprimido, un revólver, una pistola a fogueo, un cargador con capacidad para 15 tiros, 16 cartuchos 9 mm, nueve cartuchos calibre .12, 31 plantas de cannabis, 107,34 gramos de cannabis procesada, 97,98 gramos de clorhidrato de cocaína, 18,33 gramos de ketamina (tusi), seis pastillas de MDMA (éxtasis), 24,62 gramos de hongos alucinógenos, 1 millón 339 mil pesos en efectivo, cigarrillos de contrabando y fuegos artificiales.
Tras las audiencias de control de detención, tres de los imputados quedaron en prisión preventiva, mientras que los otros cuatro fueron sometidos a medidas cautelares como arresto domiciliario, arraigo nacional y prohibición de comunicarse entre sí. El tribunal fijó un plazo de investigación de cuatro meses.
El operativo fue ejecutado con la participación de más de 60 funcionarios policiales y 25 vehículos institucionales, permitiendo fortalecer el control y la seguridad en sectores rurales de Longaví, afectados por la presencia de esta banda.
Las investigaciones continúan abiertas con el propósito de determinar la posible participación de otras personas vinculadas a esta organización delictual.